¿Cuáles son los procedimientos estándar de evaluación?

Antes de que pueda hacerse un plan de tratamiento o rehabilitación, el traumatólogo debe averiguar cuál es la causa de su afección. Por lo general, hará un examen físico y le revisará los antecedentes médicos. También examinará sus síntomas. Informe al proveedor qué otras enfermedades, lesiones o molestias pueden estar causando el dolor o la afección. Mencione también los tratamientos o medicamentos que ha usado. Es posible que tenga que hacerse pruebas después del primer examen.

Procedimientos avanzados de evaluación

Si necesita mayor evaluación, es posible que le hagan una de estas pruebas:

• Radiografía. En esta prueba, se usan haces de energía electromagnética para generar imágenes de los tejidos, los huesos y los órganos.

• Artrografía. Es una radiografía en la que se ven las estructuras de los huesos después de inyectar un líquido de contraste en la zona de la articulación. Si el líquido se dispersa a una zona a la que no corresponde, es posible que se trate de una enfermedad o lesión. Esta pérdida del líquido puede significar que hay un desgarro, una abertura o una obstrucción.

• Resonancia magnética. En esta prueba se usan imanes grandes, radiofrecuencias y una computadora para generar imágenes detalladas de los órganos y las estructuras del cuerpo. Con frecuencia permiten determinar si hay daños o una enfermedad en un ligamiento o músculo cercano.

• Tomografía computarizada. En esta prueba se usan radiografías y tecnología por computadora para crear imágenes horizontales, o axiales (a menudo llamadas cortes) del cuerpo. En la tomografía computarizada se obtienen imágenes detalladas de cualquier parte del cuerpo, como los huesos, los músculos, la grasa y los órganos. Estas imágenes son más detalladas que las que se obtienen en las radiografías generales.

• Electromiografía. En esta prueba se evalúan las funciones de los nervios y los músculos.

• Ecografía. Se usan ondas de sonido de alta frecuencia para generar una imagen de los órganos internos.

• Artroscopia. Esta prueba se usa para evaluar una articulación. Se usa un tubo óptico pequeño que tiene una luz (artroscopio). Se lo introduce en la articulación a través de un corte pequeño. Las imágenes del interior de la articulación se proyectan en una pantalla. Se usa para evaluar cambios degenerativos o por artritis en la articulación. También permite detectar enfermedades en los huesos, desgarros o tumores en los ligamentos o en los cartílagos y puede ser útil para determinar la causa del dolor e inflamación de los huesos.

• Mielografía. En esta prueba se inyecta un tinte o medio de contraste en el conducto vertebral. A continuación, un estudio específico con radiografías permite que el proveedor de atención médica evalúe el conducto vertebral y las raíces de los nervios.

• Exploración ósea con radionúclidos. Es una prueba nuclear de diagnóstico por imágenes. Se usa una cantidad muy pequeña de material radiactivo, que se inyecta en el torrente sanguíneo para que un escáner lo detecte. En esta prueba se muestra el flujo sanguíneo a los huesos y la actividad de las células en el interior del hueso.

• Análisis de sangre. Es posible que se usen otros análisis de sangre para revisar si hay determinados tipos de artritis u otros trastornos.

Una vez que el proveedor de atención médica ha recolectado y examinado los resultados de las pruebas, hablará con usted sobre las opciones de tratamiento. Juntos pueden elegir el tratamiento más adecuado para su caso.